Aprendimos que, para llevar a cabo una tarea, es necesario que exista un flujo de ejecución, Pero... ¿Como logramos esto? pues lo primero es definir la cuál es la finalidad. Luego y muy importante, es dividir en pequeñas tareas y priorizar entre ellas, para que de esta manera logremos ejecutar cada una de las tareas más pequeñas a esto es lo que llamamos flujo de ejecución para que al final la suma de esta tendrá como resultado resolver o completar la tarea inicial, y así es como nos enfocamos en lo que más importa.