En esta clase, hablamos sobre las creencias que tenemos y cómo pueden afectar nuestro día a día. Vimos el ejemplo de Marcela, quien creía que no tenía tiempo para hacer ejercicio porque priorizaba su trabajo.
También hablamos sobre la disciplina y el éxito. Descubrimos que no necesitamos más disciplina de la que ya tenemos, sino que debemos enfocarnos en administrar mejor nuestro tiempo y energía.
La clase nos invita a reflexionar sobre nuestros propios objetivos y a crear pequeños hábitos que nos ayuden a alcanzarlos. ¡Recuerda que el éxito no es una maratón, sino un sprint!