Aquí nos comparten una historia muy común. Yo tenía un compañeron en la universidad que se atrasó justo por competir en natación y otro en americano. Creo que los deportes llegan a ser adictivos y por eso a veces resulta complicado mantener el equilibrio, pero es fundamental lograrlo porque de otra forma siempre hay consecuencias. En mi caso yo competía en tahitiano y decidí salirme cuando tenía mayor cantidad de materias. Es dificil soltar lo que nos apasiona, pero uno tiene que elegir y siempre puedes hacer un espacio para todo lo que te apasiona. La verdad estoy satisfecha y feliz con mi elección, porque para mí siempre estuvo la carrera primero y el no atrasarme me daba paz, tranquilidad y felicidad.