Reflexión sobre el enfoque y la disciplina
Ser una persona más enfocada me permitiría:
Avanzar con mayor consistencia en mis objetivos técnicos y profesionales, como mejorar en automatización y análisis de datos.
Reducir la procrastinación y aprovechar mejor mi tiempo, especialmente después del trabajo.
Sentirme más satisfecho al cerrar el día sabiendo que cumplí con lo que me propuse.
Tomar decisiones más claras, sin caer en distracciones que desordenan mis prioridades.
Y, lo más importante, ganar confianza en mí mismo, al ver que soy capaz de mantenerme firme en el proceso, incluso cuando no hay motivación.