El mercado laboral ha cambiado drásticamente. Los puntos demasiados pero tal y como la explicación anterior, se pueden ejemplificar los más importantes como la tecnología, ya que se utilizaba más la mano de obra y la fuerza bruta con horas de trabajo en bodegas e incluso en la oficina sin considerar que se podía facilitar la producción con la aplicación de sistemas, aplicaciones y equipos. Con ello nos lleva al segundo punto, la responsabilidad social, ya que había poco interés en las necesidades laborales del trabajador, el cual aceptaba ciertas condiciones de trabajo no óptimas, pero se convencía de que tenía que aceptarlo ya que tenía un trabajo y no iba a poder conseguir otro. De la mano con ello, como trabajador pensábamos que no requeríamos más habilidades, que lo que aprendimos en la escuela era más que suficiente. Ahora es indispensable desarrollar habilidades un poco diferentes a nuestro campo laboral pero que va a expandir nuestra visión a un mejor desarrollo tanto personal como laboral. Finalmente nos lleva a que, en el pasado no se veían más opciones que entrar a una empresa y dedicarse 30 años a eso hasta llegar a la jubilación. Ahora, sin importar la edad o condición, es posible enfocarnos a desarrollar ciertas habilidades que nos lleve a depender uno mismo de realizar algún trabajo que incluso no es necesario estar precencialmente, pues la tecnología no ha permitido resolver problemas de alguien más del otro lado del mundo, siempre y cuando sea lo mejor para ambas aprtes.