Me agrada mucho en la idea de planear, no solo los hábitos y el tiempo que hay que dedicarles, la recompensa es una meta de igual forma, ya que esta nos impulsará a que nos podamos apegar a la creación del hábito de forma más significativa, pero, considero que la recompensa debe ser algo que realmente nos apasione, no solo nos guste superficialmente, de lo contrario no tendrá el impácto que buscamos.
¡Hola Mauricio!
Comprendo perfectamente tu punto de vista, es muy importante tener una recompensa que realmente nos motive a cumplir nuestros objetivos y hábitos. Lo ideal es que la recompensa esté alineada con nuestras pasiones y objetivos personales, para que así tengamos un mayor compromiso y motivación en el proceso.
Por ejemplo, si mi objetivo es leer un libro al mes, mi recompensa podría ser comprar un libro que lleve tiempo queriendo leer o ir a una librería y pasar una tarde disfrutando de la lectura. Si mi objetivo es hacer ejercicio, mi recompensa podría ser comprar un par de zapatos deportivos nuevos o inscribirme en una clase de yoga.
Recuerda que la recompensa debe ser algo que realmente te apasione y te impulse a seguir adelante. Espero que esto te ayude a elegir la recompensa adecuada para ti y a cumplir tus objetivos y hábitos. ¡Espero haber ayudado y buenos estudios!