El modelo Kirkpatrick es un marco de evaluación de programas de formación y capacitación, desarrollado por Donald Kirkpatrick en 1959. Este modelo es ampliamente utilizado para medir la efectividad de las intervenciones de formación en las organizaciones. El modelo se compone de cuatro niveles de evaluación:
- Reacción: Qué mide: La respuesta de los participantes a la formación. Cómo se mide: Encuestas de satisfacción, comentarios y retroalimentación de los participantes sobre la calidad de la formación, el contenido, los instructores, y el ambiente.
- Aprendizaje: Qué mide: Los conocimientos, habilidades o actitudes adquiridas durante la formación. Cómo se mide: Pruebas previas y posteriores a la formación, evaluaciones de desempeño, ejercicios prácticos y demostraciones.
- Comportamiento: Qué mide: La aplicación de los conocimientos y habilidades aprendidos en el entorno laboral. Cómo se mide: Observaciones directas, evaluaciones de desempeño, entrevistas con supervisores, y autoevaluaciones de los participantes.
- Resultados: Qué mide: Los impactos finales de la formación en la organización, tales como mejoras en la productividad, reducción de costos, aumento de la calidad, satisfacción del cliente, y retorno sobre la inversión (ROI). Cómo se mide: Indicadores de desempeño organizacional, análisis de métricas antes y después de la formación, y comparaciones con objetivos estratégicos.