El quedarme a la mitad, e inclusive al inicio del camino es algo muy común en mí. El hubiera es algo que suele estar en mi mente, "si me hubiera esforzado más", si hubiese aprovechado más mi juventud y energía hoy tendría más conocimiento e incluso oportunidades. Pero nunca es tarde, es increíble como a los veintitantos nos podemos sentir devastados, queremos hacer todo, comernos el mundo y al final no poder dar un paso por temor a fallar, no estar preparados ni a la altura. Estoy aprendiendo que cada acción que haga hoy, ayudará a mi yo del futuro. No es necesario que acapare todo lo que deseo hacer hoy, he pensado que un paso firme me hará llegar finalmente a mi meta.