• El ejercicio físico es aún más crucial para ti, ya que ayuda a mejorar la concentración y la capacidad de atención. Trata de incluir actividad física a diario, incluso si son sesiones cortas.
• El sueño es fundamental. Procura mantener horarios regulares de sueño y asegúrate de dormir las horas necesarias. El descanso adecuado ayudará a tu cerebro a procesar y consolidar lo aprendido.
• Haz descansos frecuentes durante tus sesiones de estudio. Tomar pequeños breaks te permitirá mantener la atención por más tiempo.
• Utiliza técnicas de estudio que se adapten a tu estilo de aprendizaje, como el uso de flashcards, videos o audios. Esto hará que el proceso sea más ameno y efectivo para ti.
• No te frustres si te cuesta mantener la concentración. Es normal con el TDAH. Sé paciente contigo mismo y celebra tus pequeños logros.