El hecho de que los arrays (arreglos) en la mayoría de los lenguajes de programación empiecen por el índice cero es una convención histórica que se ha mantenido en el tiempo debido a diversas razones:
Acceso a la memoria: En muchos lenguajes de programación, los arrays están implementados como bloques contiguos de memoria. El primer elemento del array se encuentra en la posición de memoria más baja, es decir, la posición 0. Esto permite un acceso más eficiente a los elementos del array mediante aritmética de punteros.
Matemáticas y lógica: Al utilizar índices que comienzan en cero, la lógica detrás de los bucles y las operaciones matemáticas se simplifica. Por ejemplo, si tienes un array de 10 elementos, los índices válidos son de 0 a 9. Esto permite que los bucles sean más sencillos, ya que solo necesitas verificar si el índice es menor que el tamaño del array para recorrerlo completamente.
Historia y compatibilidad: Los lenguajes de programación más antiguos, como el lenguaje C, que influyó en muchos lenguajes posteriores, adoptaron esta convención y se ha mantenido en muchos otros lenguajes para mantener la compatibilidad con el código existente y facilitar la migración entre lenguajes.
Consistencia con la notación de punteros: En lenguajes que manejan punteros, los punteros apuntan a la dirección de memoria del primer elemento del array, y esa dirección es representada por el índice 0. Esto simplifica la aritmética de punteros y facilita la manipulación de datos en la memoria.
Es importante destacar que, si bien la convención de empezar por cero ha sido ampliamente adoptada, algunos lenguajes o entornos pueden utilizar índices que comienzan en uno o incluso permitir al programador elegir el índice de inicio. Sin embargo, en la mayoría de los casos, los arrays en lenguajes de programación comunes como C, C++, Java, Python, entre otros, siguen la convención de comenzar por cero.