S (Específica): Mi meta es aprender a programar, centrándome inicialmente en el lenguaje Python. Quiero adquirir habilidades prácticas que me permitan escribir código funcional y comprender los fundamentos de la programación.
M (Medible): Voy a medir mi progreso mediante la capacidad de completar proyectos de programación específicos. Estableceré hitos semanales y mensuales, como la finalización de ciertos cursos en línea y la creación de pequeñas aplicaciones.
A (Alcanzable): Dada mi dedicación diaria de al menos dos horas al aprendizaje de la programación y el acceso a recursos educativos en línea, creo que es alcanzable adquirir un nivel competente en Python en seis meses.
R (Relevante): Este objetivo es relevante para mis aspiraciones profesionales, ya que fortalecerá mis habilidades en el campo de la tecnología de la información, permitiéndome asumir proyectos más avanzados y desafiantes en mi trabajo actual.
T (Temporal): Establezco un plazo de seis meses para alcanzar esta meta, proporcionando un marco temporal claro y realista para medir mi progreso y lograr resultados tangibles en un período de tiempo definido.