¿Qué habilidad era fundamental hace 5 años y ahora no lo es?
Hace cinco años, una habilidad muy valorada era el dominio avanzado de herramientas como Microsoft Excel y Word. Saber hacer informes, gráficos o dashboards detallados era visto como una gran fortaleza técnica incluso en entornos de desarrollo. Sin embargo, hoy en día estas tareas se han automatizado o simplificado con herramientas colaborativas como Google Sheets, Notion o Airtable, y más aún en el entorno full stack donde los datos se visualizan dinámicamente mediante frameworks como Angular, dashboards en tiempo real, o BI embebido. El foco ha pasado de "hacer bien un informe" a "crear una herramienta que lo genere sola", con mejores integraciones, automatizaciones y experiencia de usuario.
En tu mercado laboral, ¿qué está cambiando? ¿Qué debería de ser un punto de estudios ahora?
En el mercado laboral actual para desarrolladores full stack, están ocurriendo varios cambios clave. Ya no basta con dominar un stack tecnológico; ahora se espera que puedas resolver problemas complejos combinando código, automatización, buenas prácticas de arquitectura y visión de producto. Por ejemplo, ya no se trata solo de consumir una API REST: se valora que puedas diseñarla de forma escalable, segura y documentada, usando JWT, OAuth2, Swagger o Apidog. También ha cambiado el enfoque hacia el uso inteligente de la inteligencia artificial, tanto para agilizar tareas repetitivas (con Copilot, GPT, etc.) como para integrarla directamente en tus sistemas mediante APIs de IA. Además, el trabajo remoto y distribuido exige habilidades de comunicación técnica más sólidas, capacidad de organización con herramientas como Notion, Jira o Linear, y una mentalidad más autónoma.
Para mantenerte competitivo y crecer profesionalmente, hay varias áreas en las que deberías enfocar tu estudio desde ya. Primero, profundiza en inteligencia artificial aplicada al desarrollo, especialmente cómo consumir e integrar APIs de LLMs como OpenAI, Google Gemini o HuggingFace, incluyendo conceptos como embeddings, clasificación de texto o RAG (retrieval augmented generation). Segundo, mejora tu automatización backend usando herramientas como RabbitMQ (que ya usas), pero también cron jobs, scripting con Python/Node.js o plataformas como n8n o Temporal. Tercero, afianza tu conocimiento en seguridad web, incluyendo buenas prácticas con JWT, OAuth2, control de sesiones, manejo de tokens y protección ante ataques comunes (XSS, CSRF, SQLi). Cuarto, lleva tu dominio de bases de datos al siguiente nivel, incorporando optimización de consultas, modelado relacional avanzado y uso de herramientas como DBT, Superset o Power BI para generar valor a partir de datos. Por último, fortalece tu pensamiento de producto y habilidades de UX: entiende mejor cómo piensan los usuarios, cómo prototipar ideas (con Figma, por ejemplo), y cómo crear valor más allá del código.