¡Hola, Carlos!
Me alegra ver que estás organizando tu agenda semanal de manera tan detallada. Dedicar 48 horas a la semana al estudio es un compromiso significativo, y dividirlo en 8 horas al día es una excelente manera de mantener un ritmo constante. Además, tener un espacio dedicado como tu cuarto, ambientado para tus actividades, sin duda te ayudará a mantener la concentración.
En cuanto a los formatos y estilos que mencionas, "acomodador" y "convergente" son enfoques interesantes. El estilo acomodador suele ser práctico y basado en la experiencia, lo que significa que podrías beneficiarte de actividades que te permitan aplicar lo que aprendes de manera práctica. Por ejemplo, podrías dedicar parte de tu tiempo a proyectos o ejercicios que te permitan experimentar y aprender haciendo.
Por otro lado, el estilo convergente se centra en la resolución de problemas y la aplicación de ideas en situaciones concretas. Esto podría implicar que te enfoques en ejercicios que desafíen tu capacidad de encontrar soluciones, como estudios de caso o problemas prácticos.
Una forma de estructurar tu agenda podría ser dividir las 8 horas diarias en bloques dedicados a diferentes tipos de actividades. Por ejemplo:
- 2 horas para lectura y comprensión teórica.
- 2 horas para ejercicios prácticos y aplicación de conceptos.
- 2 horas para proyectos o actividades que requieran resolución de problemas.
- 2 horas para revisión y reflexión sobre lo aprendido.
Recuerda que es importante también incluir descansos para mantener la productividad y evitar el agotamiento.
Espero que estas sugerencias te sean útiles y que puedas adaptar tu agenda de la mejor manera para ti. ¡Espero haber ayudado y buenos estudios!