A mí lo que más me distrae son dos cosas: el celular y los pensamientos que me dan vueltas cuando tengo algún problema personal. Me pasa justo cuando intento estudiar o concentrarme. Para solucionarlo, decidí dejar el celular lejos o en modo avión, y también escribir en un papel lo que me preocupa antes de empezar, así despejo la mente y me enfoco mejor.