Las dos principales barreras son la atención que requieren mis dos pequeños hijos de 4 y 6 años y todas aquellas tareas inherentes a llevar adelante un hogar, lo que dificultan mucho poder dedicarle tiempo de calidad al estudio.
A partir de esto, el plan de acción sería aprovechar cada pequeño momento libre durante la jornada para realizar alguna tarea referida a la formación, cambiando jornadas extensas de estudio por varios lapsos mas cortos esparcidos durante el día para darle dedicación exclusiva a la lectura, a ver videos o realizar prácticas.