Resultado (80): He generado buenos resultados en términos de cumplimiento de objetivos y entrega de proyectos. Aunque el proceso fue desafiante, al final logramos completar el proyecto requerido por la empresa con éxito, demostrando nuestra capacidad para trabajar en equipo. Aplicación (75): He podido aplicar gran parte de lo aprendido en términos de coordinación y colaboración dentro del equipo. A pesar de las dificultades iniciales, logramos implementar estrategias efectivas para la organización y ejecución de nuestras tareas. Conocimiento (85): Puedo recordar la mayoría de los conceptos y técnicas relacionados con el trabajo en equipo, incluyendo la importancia de la comunicación efectiva, la distribución de tareas según las fortalezas de cada miembro, y la gestión del tiempo y recursos. Satisfacción (70): Aunque el proceso fue complicado y a veces frustrante, me siento satisfecho con el aprendizaje y los resultados obtenidos. Aprender a superar los desafíos en un entorno de equipo me ha proporcionado valiosas lecciones y experiencias. Dedicación (90): Me dediqué intensamente al proceso de aprendizaje, invirtiendo tiempo y esfuerzo para asegurar que el equipo funcionara de manera eficiente. Mi compromiso con el proyecto y con mis compañeros fue alto, lo cual fue crucial para el éxito del proyecto.