Mi próximo desafío de aprendizaje es dominar una nueva tecnología, y para lograrlo sin abrumarme, voy a dividir el proceso en bloques pequeños. Primero, empezaré por lo más básico: entender los conceptos y practicar con ejemplos simples. Luego, avanzaré poco a poco a temas más complejos, como módulos, servidores o APIs, siempre viendo videotutoriales y practicando a la par. Me organizaré por semanas, dedicando tiempo fijo cada día y evaluando mis avances. Así, en lugar de estresarme, podré aprender de forma constante, clara y con motivación.