Piensa en el próximo desafío de aprendizaje que tienes. ¿Cómo puedes, con base en los ejemplos del curso, romperlos en pequeños bloques y organizar tu proceso de aprendizaje?
Uno de mis próximos desafíos de aprendizaje es mejorar mi inglés. Lo dividiré en pequeños bloques: primero, practicaré vocabulario básico, luego me enfocaré en la gramática, y después mejoraré mi pronunciación. Organizaré mi tiempo para estudiar un bloque por día y haré ejercicios prácticos para reforzar lo aprendido. De esta manera, iré avanzando poco a poco. Y mi meta a fin de año es entenderlo mucho más y poder mantener una conversación mucho más fluida.