Construir un mindset de crecimiento requiere paciencia, conciencia y práctica diaria. Al identificar los momentos en los que me limito y aplicar herramientas concretas como el enfoque, el propósito y el registro del avance, puedo transformar la forma en que aprendo y me desarrollo. Al final, no se trata de saber todo, sino de estar dispuesta a seguir aprendiendo.