Piensa en una situación de aprendizaje que hayas vivido y que tuviste dificultad en salir de la zona de estrés. ¿Cómo fue esa situación? ¿Qué te dejó atrapado en la zona de estrés?
El primer recuerdo que viene a mi mente es haber sentido estrés por autoexigirme demasiado. Al querer aprender demasiado en poco tiempo y quizás el hecho que peligrara el cumplir con las expectativas que me había planteado, consiguió en su momento sentir que no me alcanzaba el tiempo, que no iba a cumplir con los tiempos limites, y eso me llevaba a un bucle de decirme a mi mismo "no llego".
Ahora lista 3 actitudes diferentes que puedes tener en la próxima vez para no cometer los mismos errores y pasar rápidamente a la zona de Aprendizaje.
1- Es importante plantearse objetivos que singifiquen un desafío, pero que a su vez reales. Hay que ser capaces de ser flexibles si una determinada situación amerita una reorganización o un replanteamiento de las metas fijadas. Pero siempre manteniendo la exigencia suficiente para jamás tomarse el asunto a la ligera.
2- Recordar que si el convicción es suficiente, con disciplina y dedicación, todo se aprende. Confiar siempre en mi propia inteligencia, y ser constante, un inconveniente, no es razón para abandonar, sino mas bien algo para ser superado.
3- Escucharse a uno mismo, cuerpo y mente. Es posible que si se lleva demasiados dias estudiando o trabajando sin parar, nuestro cuerpo y mente acumulen cansancio, lo que puede resultar en "no entender" o "no saber como resolver cierta situacion o problema", en estos momentos es importante darse un respiro para luego retomar con mayor claridad y energía.