Durante la pandemia, tuve dificultades significativas con una materia de idiomas en la universidad. El estrés era tan intenso que experimenté ansiedad y depresión, y el tiempo parecía pasar muy lentamente. Esta situación me dejó atrapado en la zona de estrés debido a la dificultad para comprender el material y la falta de apoyo adecuado en ese momento.
Para evitar estos problemas en el futuro y pasar rápidamente a la zona de aprendizaje, planeo adoptar las siguientes tres actitudes:
- Cambiar el docente si el enfoque actual no está funcionando, para asegurar una mejor comprensión del material.
- Adelantar los temas de clase para no quedarme atrás y reducir la ansiedad relacionada con la acumulación de contenido.
- Encontrar un equilibrio adecuado entre estudio y descanso para mantenerme motivado y prevenir el agotamiento.