Creo que el mantener una buena salud física, mental y espiritual nos ayudaría a que el resto de las cosas sean más fáciles de llevar a cabo. Tener la mente clara y tranquila nos ayuda a sobrellevar mejor los problemas y a tomar decisiones más acertadas sea en el ámbito laboral o personal. Una buena salud física nos ayuda a tener más energía para llevar a cabo las tareas del día sin tanto esfuerzo y a poder descansar mejor. El estar bien espiritualmente nos ayuda a estar mejor con nosotros mismos y por consiguiente con los demás, propiciando un mejor ambiente tanto sea con compañeros de trabajo, familia, pareja o amigos.