Para crear un mindset de crecimiento y reforzar nuestro modelo mental, podemos practicar el aprendizaje continuo, fomentar la resiliencia y la perseverancia ante los desafíos, cambiar nuestra perspectiva hacia los errores como oportunidades de aprendizaje, y mantener una mentalidad abierta a nuevas ideas y experiencias. También es importante rodearnos de personas y entornos que apoyen nuestro crecimiento y nos animen a seguir adelante.