Reformular los errores como aprendizajes: Después de cometer un error hacerme preguntas como¿Qué aprendí de esta experiencia? ¿Qué haría diferente la próxima vez?. Tambien, llevaria un "diario de aprendizaje" donde anote cada semana algo que no salió como esperaba y qué aprendizaje puedo extraer de eso.
Usar el lenguaje del "todavía" (el poder del "aún no"): Sustituir frases como "No soy buena en esto" por "Todavía estoy aprendiendo a hacerlo". Tambien, usar este lenguaje con otras personas para reforzarlo en mi misma.