Cada uno se conoce y sabe cuál es su talón de Aquiles. Podemos llegar a tener algunos malos hábitos, pero eso no nos debe desmotivar, de eso se trata el curso, de cambiar, de generar nuevos hábitos, de extirpar distractores enemigos de alcanzar buenos resultados. La organización y la disciplina son buenos aliados para alcanzar objetivos concretos y graduales. Ellos nos mantienen ocupados y concentrados en terminar actividades diarias.