Al llegar al final de este curso sobre el enfoque, quiero reflexionar sobre todo lo que hemos aprendido y cómo esto puede aplicarse en mi vida diaria. Durante este tiempo, me he dado cuenta de que, para lograr los resultados que quiero, es fundamental poner toda mi atención y energía en lo que realmente importa.
Uno de los conceptos clave que se me quedó grabado es el proverbio ruso: "Si persigues dos conejos al mismo tiempo, no atraparás ninguno". Es una clara lección sobre la importancia de concentrarme en una sola cosa a la vez, porque tratar de hacer demasiado puede hacer que termine sin hacer nada de manera efectiva.
También aprendí a transformar mis listas de tareas en listas de éxito. Esto significa dejar de lado las tareas que no son realmente cruciales y enfocarme solo en lo que realmente va a moverme hacia mis objetivos. Sabemos que decir "no" es esencial para no caer en la trampa de intentar complacer a todos. A veces, me cuesta, pero negociar y priorizar es clave para mantenerme en el camino correcto.
