1- Ver el Feedback como una Oportunidad de Crecimiento
- Cómo Implementarlo:
- Cambiar la perspectiva hacia las críticas constructivas, viéndolas como información valiosa para mejorar.
- En lugar de sentirnos desanimados por los comentarios negativos, reflexionemos sobre ellos y busquemos formas concretas de mejorar.
- Ejemplo práctico: Si un profesor o colega señala un área de mejora en nuestro trabajo, anotemos el consejo, desarrollemos un plan para fortalecer esa habilidad y revisemos el progreso periódicamente.
- En el Día a Día:
- Al recibir feedback, podemos responder agradeciendo, haciendo preguntas para aclarar dudas y actuando con intencionalidad para implementar las recomendaciones.
2- Salir de la Zona de Confort
- Cómo Implementarlo:
- Identificar tareas o áreas donde solemos evitar desafíos y planificar actividades que nos obliguen a superar esos límites.
- Repetir afirmaciones como "Todavía no soy bueno en esto, pero puedo aprender" para fortalecer la mentalidad positiva y de superación.
- En el Día a Día:
- Podemos proponernos aprender algo nuevo cada semana, como inscribirnos en un curso breve o realizar tareas que requieran habilidades que aún no dominamos. Por ejemplo, si la matemática es una dificultad, dedicar 20 minutos diarios a practicar problemas específicos puede ayudarnos a reforzar esta área.