La situación fue que, al ser una persona tímida las clases presenciales después de la pandemia, me daba mucho miedo, ya que como la gran mayoría son hombres en el salón, y algunos de ellos sabían más que yo porque incluso ya trabajan. Sin embargo, las tres cosas que hice fue, primero mentalizarme, que cada uno va a su ritmo. Segundo, ser yo misma pero con la idea de tratar de sociabilizar poco a poco, tampoco exigirme y finalmente, enfocarme más en repasar y aprender nuevas cosas.