Imagina que estás analizando el código de una aplicación Java y encuentras la siguiente clase:
LA RESPUESTA ES LA A:
La clase no debería tener el método setSaldo.
El atributo saldo solo debería ser modificado por la propia clase, por medio de los métodos retirar y depositar, pero al declarar un método setter para él, el encapsulado se rompe, pues su valor podrá ser modificado arbitrariamente de fuera de la clase.