En esta última clase aprendí sobre la importancia de los cases o casos prácticos en la aplicación de metodologías ágiles dentro de la industria. Estos casos son ejemplos reales de cómo distintas organizaciones —como la Scrum Alliance o la Agile Alliance— aplicaron ideas ágiles para resolver problemas específicos.
Lo que más me quedó claro es que estos casos son súper útiles para aprender, pero no se trata de copiarlos y pegarlos tal cual. Cada empresa tiene su propio contexto, su cultura y sus desafíos únicos, así que lo importante es entender por qué se tomaron ciertas decisiones en esos casos y cómo se podrían adaptar a la realidad de mi propia organización.
La clave está en analizar las motivaciones detrás de cada historia y no solo quedarse con la solución. Al final, el objetivo es usar esos aprendizajes como inspiración para aplicar todo lo que fuimos viendo en el curso de una forma consciente, estratégica y adecuada a nuestro entorno.
Y bueno… ¡felicidades para mí por llegar al final del curso! Aprendí muchísimo y ahora tengo herramientas más claras para trabajar de forma ágil y flexible.