7 recetones bien chonchos pa’ foráneos que le sacan a las verduras (pero quieren estar mamadísimos)
Mira, ser foráneo es todo un trip. Entre las desveladas, la compu que no carga y la renta que casi te deja en la calle, comer bien suena a chiste. Y si aparte odias las verduras, pues peor tantito. Pero tranqui, que aquí te van 7 recetones altos en calorías pa’ que empieces a agarrar cuerpo y no termines comiendo maruchan diario. Todo fácil, sabroso y sin verduras. Pura proteína, grasa buena y sabor machín.
Primero, el clásico de clásicos: tortilla de atún con queso. Esto es como el desayuno de los dioses foráneos. Tres huevos, atuncito, queso bien derretido y si le quieres meter más punch, hasta mayonesa. Lo haces en 10 minutos y te deja full todo el día. Perfecto si quieres inflarte sin complicarte.
Ahora, pa’ esos días donde el hambre pega recio: pasta con pollo cremoso. Papá, esto es una joya. Le echas pollo doradito, crema, quesito, y lo mezclas todo con pasta. Queda choncho, sabrosón y sin ninguna planta verde que te arruine el plato. Ideal después del gym o pa’ una comidita con los compas.
¿Antojo de algo rápido pero potente? Éntrale al sándwich triple de huevo, jamón y crema de cacahuate. Sí, crema de cacahuate. Suena raro, pero uff, te vuela la cabeza. Le metes de todo: huevo duro, jamón, pan, grasa rica. Te lo zumbas en dos mordidas y te sientes listo pa’ cargar el refri (aunque no tengas).
Pa’ desayunar con estilo (y con hambre de campeón), te lanzas una avena power con plátano y mantequilla de maní. No te me espantes, esto no es la avena aburrida de la abuelita. Es cremosa, dulce, pesada y te deja lleno como si hubieras ido a buffet. Es como postre con esteroides.
Y si lo tuyo es tomártelo todo de jalón, te presento al licuado rompe-camisetas. Plátano, avena, crema de cacahuate, leche entera y si tienes, hasta proteína. Lo licúas y pum: comida líquida con más poder que cualquier batido del gym. Ideal cuando andas en friega y no tienes tiempo ni pa' lavar trastes.
Vamos con algo más “pecaminoso”: pollo frito con puré de papa instantáneo. Esto es grasa con proteína, pero del tipo que te ayuda a subir bonito. Empanizas, fríes, haces el puré en 5 minutos con leche y mantequilla, y ya está: comida de campeones. Te vas a sentir como en KFC pero versión pobre y poderosa.
Y cerramos con broche de oro: quesadillas monstruo de chorizo y frijoles. Aquí no hay dieta que valga. Esto es pa’ darte gusto. Chorizo bien frito, frijolitos refritos, queso a morir. Lo metes todo en una tortilla de harina y la doras hasta que quede crujiente. Un manjar pa’ el alma y el músculo.
Así que ya sabes, compa. Si odias las verduras pero quieres dejar de parecer alambre con ropa, estas recetas son tu salvavidas. No hay pretextos. Son fáciles, llenadoras y bien sabrosas.
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Esto utiliza jerga mexicana, por si a alguien le interesa :)