En mi caso, las interferencias que me hacen perder el enfoque en mis tareas incluyen los pop-ups y las actualizaciones en mi teléfono, especialmente de aplicaciones como Whatsapp y servicios de compras. Dado mi constante seguimiento del teléfono debido a mis responsabilidades laborales, tiendo a prestar atención a todos los pop-ups. Además, las situaciones o problemas no resueltos en el trabajo o en mi vida personal también afectan mi concentración. Soy propenso a la sobrethinking, lo que significa que cuando enfrento un problema, tiende a ocupar constantemente mi mente y me hace distraerme fácilmente.