Algunas ideas que me han surgido para poder balancear el ámbito profesional con el personal, es darle a cada uno su tiempo y su valor. El trabajo puede ser una de tus pasiones, pero no todas y es necesario desarrollar y cuidar otros aspectos.
A veces pensamos que, como nos apasiona nuestro trabajo, ese debe ser toda nuestra vida o nos va a gustar todo de él todo el tiempo, pero no es así. Como todo, tendra aspectos que nos encanten y otros que no tanto, hay que aprender a mirar el trabajo con objetividad para colocarle el valor debido y el espacio correcto en nuestra vida.