En esta aula aprendí que conocernos a nosotros mismos es clave para potenciar la forma en que adquirimos nuevos conocimientos. Al alinear nuestras habilidades con las actividades laborales, podemos lograr resultados excepcionales. Además, entendí que el aprendizaje es un proceso continuo, y debemos seguir actualizándonos toda la vida para mantenernos relevantes.
El concepto de Ikigai me recordó la importancia de encontrar un propósito que impulse nuestro crecimiento. También comprendí que, según la Teoría de Kolb, cada persona aprende de manera diferente, lo que resalta la necesidad de un enfoque educativo más personalizado y flexible.